“Nuevos escenarios y desafíos para el Trabajo Social”
el desarrollo económico y social
Clase media
ROSA MARÍA CIFUENTES
ALVARO H. CIFUENTES GIL
LEOPOLDO ARTEAGA
MUJER Y FAMILIA
Su incidencia en el desarrollo
económico y social
“La tajante división entre las actividades masculinas y femeninas, los criterios de valoración social de unas y otras,
y la asignación exclusiva al varón del
ejercicio del poder
en la vida social, económica, política y
familiar, han conducido
a que el quehacer de las mujeres sea una
presencia ausente
en nuestro discurrir histórico... Si bien es
cierto que la ausencia
de las mujeres en la vida pública las ha
hecho invisibles en
la
historia, también es cierto que expresiones que rompían con
la tradición de sujeción, sometimiento y
pasividad para
asumirse como seres humanos deliberantes y
actuantes
han sido ocultados por nuestra tradición
política e histórica”
(Magdala Velásquez Toro).
PRESENTACIÓN
Este
trabajo de investigación, fue presentado por un grupo interdisciplinario de
profesores universitarios, a la Cuarta Conferencia Internacional de Mercadeo y
Desarrollo, en San José de Costa Rica en enero de 1993. Analiza en el contexto
colombiano, la autopercepción actual
que tiene la mujer trabajadora de clase media, frente a sus roles laboral, de ama de casa, compañera e
integrante activo del mercado. Reseña el análisis del contexto- factores
objetivos- que viabiliza la vinculación de la mujer al mercado laboral, y con
ello la transformación de la vida familiar, doméstica y social. El análisis de
información se concentra en factores subjetivos: la autopercepción sobre los
roles y situación femenina actual.
Propósito:
Ilustrar el
rol autopercibido por la mujer trabajadora, mayor de 22 años, de clase media de
una ciudad latinoamericana de la cordillera de los andes en la última década
del siglo xx, con relación a las variables del estudio: a su rol de
trabajadora, compañera, ama de casa, compradora y consumidora, como participe
en el desarrollo económico y social.
Objetivos específicos:
¨
Determinar las principales cualidades y defectos
autopercibidos por la mujer trabajadora, infiriendo niveles de autoconcepto y su
incidencia en el desarrollo.
¨
Comparar la autopercepción de la mujer, en sus
roles de ama de casa y trabajadora.
¨
Describir el perfil femenino de gastos de la
mujer trabajadora.
¨
Analizar y categorizar opiniones sobre el rol
sexual autopercibido por las mujeres trabajadoras.
¨
Contextualizar el cambio y la percepción que la
mujer tiene de él.
¨
Analizar el trabajo de la mujer y su impacto
actual en el desempeño de los roles familiares y sociales, en el contexto
colombiano.
Metodología:
Se diseñó
el proyecto de investigación, se hizo una revisión literaria y se diseñó el
trabajo de campo, que se realizó en una fase cualitativa y una fase
cuantitativa. Se hizo la selección muestral por conveniencia, contactando
encuestadores en universidades representativas del estrato medio, a fin de que
ellos ubicaran mujeres de su mismo estrato, en razón de no disponer de
presupuesto no apoyo institucional, para el desarrollo de la investigación.
Con base
en los objetivos iniciales se diseñó la guía para el focus group (Anexo 1),
fase cualitativa exploratoria que generó hipótesis sobre las principales
expectativas de la mujer, en relación con su papel; se redefinieron los
objetivos: ( en 2 de las 7 sesiones,
se sugirió a los investigadores, la inclusión del tema “sexo”). Estas hipótesis
fueron validadas posteriormente, mediante el diseño y aplicación de la encuesta
(Anexo 2).
Para los focus group se utilizó
una guía estructurada y con el fin de controlar la validez de la información,
se aplicó un cuestionario a los participantes al iniciar las sesiones. Los
focus group se dividieron así: 2 sesiones de grupo por segmento de edad (22 a 30, 31 a 40 y mayores de 40 años).
Se hizo una sesión adicional, con el segmento que presentó mayor controversia.
Para la fase cuantitativa se
aplicó un instrumento estructurado (que constaba de preguntas cerradas,
abiertas, de profundización, seguimiento y control) a 350 mujeres, de las
cuales se obtuvieron 339 encuestas efectivas.
Para analizar la información se
precodifican las preguntas abiertas con el 10% de los instrumentos; se
tabularon las preguntas cerradas y se cruzaron las variables edad, estado
civil, sector económico, conformación familiar, ingresos, grado de satisfacción
sexual y autopercepción.
1. ¿ De dónde partimos?
La revisión
literaria permitió contextualizar el fenómeno de vinculación laboral de la
mujer en Colombia: un proceso histórico de violencia (UNICEF, 1989),
transformaciones del campo, migraciones masivas –en mayor proporción femenina-
(Arrubla et. Al. 1982 y Tirado Mejía 1983, León de Leal, 1977), y nuevas
políticas sociales –control natal- aceleraron la urbanización e industrialización del país.
Consecuentemente, cambiaron
las instituciones, las estructuras educativas y por supuesto, la vida familiar. “La familia colombiana
ha sufrido un proceso de cambio que permite ubicarla en un estado transicional
entre la tradicional y la moderna; dicho proceso es un fenómeno ligado al
desarrollo global del país” (Gutiérrez de Pineda, 1983). Así en nuestras
ciudades dejó de ser protagonista la familia extensa; y la familia nuclear, con
menor número de integrantes, nueva estructura, funciones y roles, tomó su
lugar.
La mayor afluencia de roles
de la etapa industrial comienza a sacar a la mujer de la restringida área
hogareña y mediante su participación en la educación formal, inicia la entrada
al mercado de trabajo. (Gutiérrez de Pineda, 1983, p. 276).
El ingreso masivo de la mujer a la educación, se traduce a su
vez en el ingreso masivo al mercado cualificado. Dicha participación obedece a
la necesidad de alimentar y educar a sus hijos, por su condición especial
(soltera, abandonada o viuda), para contribuir a la economía familiar, o como
medio de realización personal. Estudio y
trabajo brindan a la mujer, no sólo mayor participación sino mayor autonomía y
capacidad para tomar decisiones en el seno familiar.
El acelerado proceso de desarrollo económico, social y familiar
y del ámbito doméstico ha cambiado, evolucionando hasta complicados y
sofisticados procesos tecnológicos dirigidos en su mayoría a buscar el
mejoramiento del nivel de vida y de consumo; en ello la mujer ha asumido un rol
protagónico, mediante su gestión individual y colectiva. Esta participación de
la mujer se ha dado principalmente en las últimas décadas, a través de
reivindicaciones y conquistas de orden jurídico, social, familiar y personal;
trascendiendo los espacios familiares y domésticos, y proyectándose hacia el
desarrollo económico y social, asumiendo derechos y responsabilidades de
carácter civil, laboral y educativo.
Mujer y trabajo
El ingreso de la mujer al mercado laboral y remunerado ha sido
estudiado en Colombia por autores como Yepes 1973, León de Leal 1977, Losada
1975, el DANE; un recorrido analítico por los censos realizados, establece la
escasa información coherente sobre la participación femenina en la economía
nacional: La mujer vinculada a la economía agraria sale del sector primario y
secundario e ingresa al terciario, engrosando los grupos de comerciantes y
vendedores. Para 1964 la mujer se desempeña en los niveles más bajos dentro de
profesionales y técnicos; son maestras, personal administrativo y secretarías.
(Dane, 1951, 1964, p. 204).
Existen diferentes factores
asociados al trabajo remunerado de la mujer: características personales
como edad y el cual tiene un efecto definitivo sobre el trabajo femenino;
usualmente las solteras participan en proporción semejante a los hombres; en
1971, en la zona urbana, el 70% de mujeres entre 24 y 44 años se encontraban
vinculadas laboralmente; cada vez es más frecuente el trabajo de las mujeres
casadas; las viudas y separadas trabajan más que las casadas, pero menos que
las solteras. Existe relación directa entre la vinculación laboral de la mujer
y la disminución del promedio de hijos en el hogar.
La situación de la mujer dentro de la familia y su
participación en el mercado de trabajo, son variables que se relacionan con el
hogar, número de hijos pequeños y tamaño de la unidad familiar. El parentesco
con el jefe de hogar determina la actividad laboral de la mujer. El número de
horas trabajadas por una mujer aumenta en la medida en que la relación con el
jefe de hogar es más lejana. Las mujeres separadas y en unión libre presentan
mayor nivel de actividad laboral. (Angulo y López, 1975, citado por León de
Leal).
El mayor nivel educativo no incide significativamente en la
tasa de vinculación laboral; mujeres menores de bajos niveles educativos tienen
alta actividad laboral. La educación está asociada con la calidad del trabajo:
para 1971 las mujeres clasificadas como sin educación o con sólo primaria,
están ocupadas en servicios domésticos en sectores urbano y rural. Las mujeres
que han terminado el bachillerato o alguna carrera intermedia, pertenecen al
grupo obrero o desempeñan funciones técnicas y profesionales; otro grupo forma
parte del personal administrativo o profesional (Dane 1971, citado por León de
Leal, 1977).
La vinculación de la mujer al mercado laboral juega un papel
definitivo en el desarrollo. La mujer ha cambiado en su nivel de vida; desde lo
doméstico hasta lo tecnológico; desde lo individual hasta lo colectivo. Así
mismo, el rol que el mundo moderno
asigna a la mujer ha cambiado su personalidad; la mujer actual no tiene
nada en común con las descritas por Jorge Isaacs en “La María ”, o hace 25 años por
García Márquez en “Cien años de Soledad”.
Los cambios económicos y sociales obligaron a la mujer a
cumplir con otros roles que no le eran asignados anteriormente; nuevas
funciones en lo económico, saliendo de su casa sin tener las condiciones para
desempeñar a cabalidad la tradicional función materna.
En términos de la “Casa de la Mujer ”, se convierte en “transgresora” que
quebranta el rol tradicional definido e impuesto culturalmente por “otros”. Los
cambios de roles y la contradicción –personalidad/ expectativas- generan
sentimientos de culpa y frustración. La mujer, al ingresar al trabajo
“abandona” la casa: rechaza el rol tradicional; asume la doble jornada, y
siente culpa; compra productos y servicios que sustituyen su presencia en el
hogar (su rol maternal y su rol doméstico); es autónoma y cuenta con recursos
para la compra. Así mismo genera mayores necesidades de reconocimiento; cambia
su conciencia de sí misma, afirma su imagen, su motivación, su pensar y decidir;
actúa más (Sundheim, S.F.).
Los planteamientos anteriores, considerados como punto de
partida, fundamentan la inquietud por caracterizar el autoconcepto actual de las mujeres de clase media, quienes en el
país han avanzado en la construcción de nuevos espacios laborales, sociales, de
nuevas relaciones, de roles de pareja y familiares.
2. ¿ A
dónde llegamos?
2.1 El
perfil de las mujeres
Las mujeres
que participaron en el estudio son económicamente activas, trabajadoras,
mayores de 22 años y de clase media.
En la página siguiente se sintetizan las características del
perfil de las mujeres que participaron en el estudio.
2.1.1. Situación Económica
Los ingresos estas mujeres oscilan entre el salario mínimo, sin
prestaciones adicionales y más de 5 salarios mínimos.
CUADRO #1: Ingresos de las Mujeres
INGRESOS (COL $)
|
#
|
%
|
No respondió
|
3
|
0.88
|
Menos de 1
salario mínimo
|
10
|
2.95
|
Entre 1 y 2
salarios mínimos
|
122
|
35.99
|
Entre 2 y 3
salarios mínimos
|
81
|
23.89
|
Entre 3 y 4
salarios mínimos
|
43
|
12.68
|
Entre 4 y 5 salarios
mínimos
|
29
|
8.55
|
Más de 5 salarios
mínimos
|
51
|
15.04
|
Total
|
339
|
100.00
|
CUADRO #2 Ingresos: Análisis porcentual comparativo
según estado civil
ESTADO CIVIL
INGRESOS (COL $)
|
SOLTERA
|
CASADA/
UNION LIBRE
|
SEPARADA/
VIUDA
|
Menos de 1
salario mínimo
|
4.0
|
2.0
|
2.9
|
Entre 1 y 2
salarios mínimos
|
42.0
|
33.3
|
25.7
|
Entre 2 y 3
salarios mínimos
|
24.7
|
26.7
|
11.4
|
Entre 3 y 4
salarios mínimos
|
14.7
|
8.8
|
20.0
|
Entre 4 y 5
salarios mínimos
|
6.0
|
11.3
|
8.6
|
Más de 5 salarios
mínimos
|
8.7
|
18.0
|
31.4
|
Más de la
mitad de las participantes devengan entre 1 y 3 salarios mínimos y que el 15%
gana más de 5 salarios mínimos; ello indica la participación femenina en la
distribución salarial del país, y su aporte económico en el hogar. Pareciera
existir relación entre estado civil e ingresos: en las solteras se concentran
más los ingresos más bajos y en las viudas los ingresos más altos; esta
relación entre estado civil e ingresos se asocia igualmente con la variable
edad.
CUADRO #3: Participación laboral de la mujer, según
sectores de producción de la economía
CARGO
|
Frecuencia
|
Porcentaje
|
No contestó
|
16
|
4.72
|
Sector financiero
|
52
|
15.32
|
Sector servicios
|
128
|
37.76
|
Sector producción
|
108
|
31.86
|
Independientes
|
4
|
7.08
|
Otros
|
11
|
3.24
|
Total
|
339
|
100.00
|
CUADRO #4: Empleados a cargo
#
|
%
|
|
No contestó
|
106
|
31.27
|
Si
|
67
|
19.76
|
No tiene
|
166
|
48.97
|
Total
|
339
|
100.00
|
Profundización:
|
||
No tiene
|
255
|
75.22
|
Ninguno
|
2
|
0.59
|
72
|
21.24
|
|
8
|
2.36
|
|
1
|
0.39
|
|
1
|
0.30
|
|
Más de 500
|
0
|
0.00
|
Los espacios laborales son fuente de
proyección socioeconómica de la mujer de clase media, en el sector producción,
servicios, financiero, e independiente, destacándose su participación a nivel
de servicios y producción, e incursionando actualmente con fuerza en el sector
financiero. Es baja la producción de mujeres que han avanzado en el campo
del trabajo independiente. De acuerdo con las preguntas de control y
profundización una tercera parte de las encuestadas no ejercen en cargos
directivos, y tienen muy poco personal a su cargo (menos de 10 empleados).
En el
estudio se evidenció que las mujeres trabajadoras aún no desempeñan un papel de
liderazgo en cuanto a la dirección de personal. Se analizó si tienen empleados
a cargo y el número, con el ánimo de relacionar esta información con su papel
en el desarrollo del país, al considerar que el nivel educativo, salarial,
expectativas de la mujer, inciden positivamente en su rol directivo a nivel
laboral.
Las
mujeres aportaron información al estudio sobre sus ingresos, en relación con
los compañeros (novio o esposo).
Los
ingresos de las mujeres continúan siendo inferiores a los del compañero, en la
mitad de los casos; y se han igualado y superado en el 41% de los casos; ello evidencia el rol activo que viene
asumiendo la mujer, en cuanto al manejo de presupuesto; es decir, el de la
actividad laboral, trae implicaciones a nivel doméstico y familiar, de gestión
y decisión en el hogar. El cruce de variables permite establecer qué
aspectos inciden en la diferencia de ingresos entre hombre y mujer.
CUADRO #5: Ingresos del compañero, según información de
las mujeres
INGRESOS
|
FRECUENCIA ABSOLUTA
|
FRECUENCIA RELATIVA
|
Superiores a los
del compañero
|
53
|
16
|
Iguales
|
83
|
25
|
Inferiores
|
171
|
50
|
No responde
|
31
|
9
|
Total
|
339
|
100
|
CUADRO #6: Ingresos de la mujer en relación con los de
su compañero: Análisis porcentual comparativo desde las variables: estado
civil. Con quién vive, sector económico y tiene empleados.
LA MUJER GANA
|
MÁS
QUE
|
IGUAL
SU COMPAÑERO
|
MENOS
|
ESTADO CIVIL
|
|||
Soltera
|
17.3
|
30.0
|
40.7
|
Casada/ Unión libre
|
14.0
|
23.3
|
62.0
|
Separada/ Viuda
|
17.1
|
2.9
|
45.7
|
CON QUIÉN VIVE
|
|||
Esposo/ hijos
|
14.4
|
25.6
|
60.0
|
Esposo
|
16.6
|
83.0
|
75.0
|
Familia de procreación
|
14.6
|
24.1
|
61.3
|
Padres/ hermanos
|
14.6
|
34.1
|
42.7
|
Padre/ madre
|
11.8
|
28.3
|
45.0
|
Familia de origen
|
13.4
|
31.7
|
43.6
|
SECTOR ECONÓMICO
|
|||
Financiero
|
13.5
|
19.2
|
55.8
|
Servicios
|
16.4
|
25.0
|
49.2
|
Producción
|
13.9
|
26.9
|
50.9
|
Independiente
|
20.8
|
25.0
|
41.7
|
TIENE EMPLEADOS
|
|||
Si
|
14.9
|
26.9
|
47.8
|
No
|
16.3
|
22.3
|
53.6
|
Las
mujeres que trabajan en el sector independiente aventajan a sus compañeros en
ingresos.
2.1.2
Nivel Educativo
El nivel
de educación se constituye en un indicador de participación de la mujer en el
desarrollo y en su propio crecimiento personal; las tradicionales teorías de
sociología educativa afirman que al incursionar en mayores oportunidades
académicas, se accede a mejores condiciones ocupacionales, laborales,
salariales y se participa en forma más decisiva en el desarrollo del país; pese
a ello también se constata la gran cantidad de profesionales que no logran una
“digna” ubicación laboral. En la fase cualitativa del estudio las mujeres
afirmaron que “La educación de antes era
represiva, en especial con la mujer”; sin embargo hoy hay mayores
oportunidades y han rebasado el nivel de educación básica (40%), e incursionado
a nivel técnico y vocacional (15. 63%), superior (39.5%) y han trascendido el
universitario (13.57%).
CUADRO #7: Nivel De educación alcanzado y terminado
NIVEL EDUCATIVO
|
#
|
%
|
No contestó
|
23
|
6.78
|
Primaria y secundaria
|
83
|
24.48
|
Técnica y
vocacional
|
53
|
15.63
|
Universitario sin
terminar
|
134
|
39.53
|
Profesional
graduado
|
38
|
11.21
|
Postgrado
|
8
|
2.36
|
Total
|
339
|
100.00
|
Los
distintos grados de participación de la mujer en mercado laboral se asocian a
sus características personales como edad, estado civil y educación; las dos
características iniciales guardan relación y tienen impacto definido sobre la
actividad de la mujer, lo cual no sucede con la educación, cuya asociación con
el trabajo puede variar.
CUADRO #8: Análisis porcentual comparativo gastos
educativos que asume la mujer
FRECUENCIA
|
SIEMPRE
|
CASI SIEMPRE
|
CON FRECUENCIA
|
POCAS VECES
|
NUNCA
|
Gastos
|
%
|
%
|
%
|
%
|
%
|
Educación Propia
|
35
|
9
|
12
|
12
|
21
|
Educación Familia
|
25
|
6
|
9
|
10
|
33
|
CUADRO #9: Perfil de gastos femeninos en educación. La
mujer siempre paga. Análisis porcentual comparativo
PERFIL DE GASTOS FEMENINOS EN
|
||
EDUCACIÓN
|
||
Propia
|
Hijos
|
|
ESTADO CIVIL
|
||
Soltera
|
38.7
|
12.7
|
Casada/ Unión
libre
|
30.0
|
29.3
|
Separada/ Viuda
|
37.1
|
52.9
|
EDAD
|
||
22- 30
|
38.4
|
16.4
|
31- 40
|
29.3
|
39.4
|
Mayor de 41
|
31.7
|
31.7
|
Al
analizar la forma como las mujeres asumen los gastos sobre su propia educación,
se establece que las solteras lo hacen siempre en un 39% y las casadas en un
30%; que a menor rango de edad, las mujeres asumen mayores gastos educativos:
entre 22 y 30 años, el 65% siempre asume sus gastos educativos; las de 31 a 40 en un 30% y las
mayores de 41 en un 10%. En Colombia la
mujer entra al mercado laboral en edades tempranas, su actividad llega a un
máximo hacia los 30 años y desciende hasta los 30 o 40, cuando se observa una
relativa estabilidad, que puede indicar la iniciación del retorno de la mujer
al hogar, terminado su “período productivo”. Las mujeres activas se
concentran cada vez más en las edades centrales. El estado civil que identifica
los distintos roles que desempeña la mujer dentro de la sociedad, tiene un
efecto definitivo sobre el trabajo femenino; el grupo de solteras participa en
una estructura similar a la masculina; Cada
vez es más frecuente el trabajo de la mujer casada, aunque con niveles de
actividad más bajos que las solteras (León de Leal, 1977). El número de horas trabajadas por la
mujer, aumenta en la medida en que la relación con el jefe de hogar es más
lejana.
La mujer ha venido ganando
espacio a nivel de mandos medios, contribuyendo así al desarrollo; es necesario
–en adelante- estimular infraestructuras
de desarrollo profesional que le permitan generar el progreso que tanto
necesita la región.
2.1.3
Estado civil
En el
estudio participaron en forma proporcional solteras y casadas y en menor
proporción las divorciadas. Se unieron las casadas con aquellas en unión libre,
considerando que conforman núcleos familiares con la pareja en el hogar;
igualmente se unieron separadas y viudas por conformar familia sin la pareja en
el hogar. El estado civil juega un papel definitivo en los roles domésticos,
laborales y en el aporte de la mujer al desarrollo social; por esta razón se
analizará en los apartes posteriores.
CUADRO #10: Estado civil de las mujeres que
participaron en el estudio. Análisis porcentual comparativo
ESTADO CIVIL
|
%
|
Solteras
|
45%
|
Casadas/ Unión
libre
|
45%
|
Divorciadas/
Separadas
|
10%
|
2.1.4
Composición Familiar
Para
analizar la composición familiar de las mujeres que participaron en el estudio
se cruzan la variable estado civil, personas con quien vive la mujer y número
de hijos. Las personas con quienes vive la mujer permiten inferir si ella aún
se encuentra con su familia consanguínea o de procedencia, o si ya ha iniciado
su propio ciclo familiar (familia de procreación). Esto a su vez determina el
nivel de responsabilidad, participación activa en los roles domésticos y puede
correlacionarse con su participación en el desarrollo social. La mujer que aún
vive con su familia de procedencia o consanguínea asume menos responsabilidades
domésticas y económicas con la familia; puede disponer más “libremente” sus
acciones laborales, sus ingresos y su vida social, en función de su
“satisfacción y realización personal”.
CUADRO #11: Análisis porcentual comparativo del estado
civil con las personas con quienes vive la mujer.
ESTADO CIVIL
CON QUIEN VIVE
|
SOLTERA
|
CASADA/
UNIÓN LIBRE
|
SEPARADA/
VIUDA
|
Esposo/ hijos
|
3.2
|
92.8
|
2.4
|
Esposo
|
0.0
|
91.7
|
8.3
|
Familia de
procreación
|
2.9
|
92.7
|
3.1
|
Padres/ hermanos
|
95.1
|
2.4
|
1.2
|
Padre/ madre
|
66.6
|
18.3
|
13.3
|
Familia de origen
|
83.1
|
9.2
|
6.3
|
El cuadro
nos ilustra la manera como se van conformando nuevas estructuras familiares en
nuestra sociedad: dada la velocidad de los cambios económicos, sociales y
culturales, la familia va haciendo ajustes que ya no permiten verla solamente
desde criterios tradicionales: Nuclear (urbana- moderna) y Extensa (rural-
tradicional); mujeres separadas y viudas inician uniones con nuevos compañeros,
asumiendo la categoría de “familias mixtas”; igualmente mujeres casadas/ en
unión libre y separadas/ viudas vuelven a vivir con su familia consanguínea,
asumiendo la categoría de “nuevas familias extensas”. Ello se ha derivado de
las situaciones económicas desventajosas en la mujer cabeza de familia, la cual
incrementa cada día más, y ha implicado un ajuste entre los valores culturales
de familia tradicional y moderna, especialmente en lo relacionado con la
negociación sobre la educación de las nuevas generaciones.
CUADRO #12: Análisis porcentual comparativo de número
de hijos y las personas con quienes vive la mujer
LA MUJER GANA
|
NÚMERO DE HIJOS
|
||||
CON QUIEN VIVE
|
0
|
1
|
2
|
3
|
Más
|
Esposo/ hijos
|
0.0
|
24.8
|
40.8
|
14.4
|
4.0
|
Esposo
|
0.0
|
16.6
|
0.0
|
41.7
|
0.0
|
Familia de
procreación
|
0.0
|
28.5
|
37.2
|
16.8
|
3.6
|
Padres/ hermanos
|
92.7
|
6.1
|
1.2
|
0.0
|
0.0
|
Padre/ madre
|
55.0
|
25.0
|
11.6
|
6.6
|
1.6
|
Familia de origen
|
76.8
|
14.1
|
5.6
|
2.8
|
0.7
|
Muchas
mujeres tienen uno o dos hijos; la mujer ha iniciado un nuevo tipo de vínculos
con su familia de origen, quien se convierte en principal estructura de apoyo
para el proceso de crianza y “alivia algunos roles domésticos” o cargas
económicas.
2.2 Autoconcepto:
incidencia en el desarrollo
El relato que hacen las mujeres, sobre sus
cualidades y defectos (cuadros #13, 14 y 15) permite identificar su percepción sobre cómo contribuyen al desarrollo:
enumeran como principales defectos el mal genio, la impaciencia y el
perfeccionismo, por “estar altamente presionadas”; enuncian más defectos (437
respuestas negativas) que cualidades (314 respuestas positivas); emplean 65
expresiones para describir sus virtudes, mientras que utilizan 92 para sus
defectos. Cada una de ellas adjudica 0.93 cualidades contra 1.28 defectos.
CUADRO #13: Autoconcepto: Autoperepción de
cualidades y de defectos
CATEGORÍAS
|
#
RESPUESTAS
|
%
|
#
EXPRESIONES
|
Cualidades autopercibidas
|
314
|
0.9
|
65
|
Defectos autopercibidos
|
437
|
1.3
|
92
|
La mujer de hoy ha cambiado mucho con
relación a sus antecesoras: se percibe como trabajadora, más que como ama de
casa y como tal describe sus principales virtudes. La percepción de sus
defectos ilustra su rol cambiante: malgeniada, impaciente y perfeccionista:
Están “altamente presionadas” por el mundo que les rodea.
CUADRO #14: Cualidades autopercibidas (primera mención)
CUALIDADES
|
FRECUENCIA ABSOLUTA
|
FRECUENCIA RELATIVA
|
1. Responsable
|
85
|
25
|
2. Sincera
|
52
|
15
|
3. Honesta
|
37
|
11
|
4. Buena
trabajadora
|
15
|
4
|
5. Sociable
|
20
|
6
|
6. Colaboradora
|
7
|
2
|
7. Sencilla
|
9
|
3
|
8. Intrépida/
Dinámica
|
9
|
3
|
9. Otras virtudes
|
105
|
31
|
Total
|
339
|
100
|
CUADRO #15: Defectos autopercibidos (primera mención)
DEFECTO
|
FRECUENCIA ABSOLUTA
|
FRECUENCIA
RELATIVA
|
1. Mal genio
|
158
|
47
|
2. Impaciente
|
50
|
15
|
3. Perfeccionista
|
27
|
8
|
4. Poco amistosa
|
11
|
3
|
5. Comunicación
|
5
|
1
|
6. Inconstante
|
5
|
1
|
7. Insegura
|
6
|
2
|
8. Otros defectos
|
77
|
23
|
Total
|
339
|
100
|
En
términos generales se infiere una autopercepción que enfatiza más las
cualidades negativas que en las positivas, denotando un bajo nivel de
autoestima, la cual es la mayor “aproximación” que las personas tienen de sí
mismas y ayuda a explicar las motivaciones y el comportamiento de las personas.
Si una persona se conoce y está consciente de sus cambios, crea su propia
escala de valores, desarrolla sus capacidades, crece e inicia el camino hacia
la autoestima. Algunos autores (Rodríguez Estarda, Mc. Clelland, Urdaneta
Ballén, Russell) sugieren que las
personas se fijan metas y niveles de exigencia consistentes en su autoconcepto;
sugieren que en la medida en la que “se avance” en ese proceso, se promoverán
mayores niveles de desarrollo. David Mc. Clelland propone la autopercepción
como uno de los elementos básicos para el desarrollo del espíritu empresarial;
el psicólogo Roberto Urdaneta Ballén determina en sus investigaciones que los
bajos niveles de estima, son uno de los principales obstáculos para el
desarrollo de Programas de Calidad Total en Colombia. La mujer ha avanzado pero
continúa considerándose en inferioridad de condiciones.
Como
estrategia de control de la información cuantitativa, en la fase cualitativa se
preguntó a la mujer, Qué hubiera sido, si
hubiera nacido hombre?. Se obtuvieron respuestas que denotan: Aceptación
del sexo: “hubiera sido lo mismo”, percepción de limitaciones: “como mujer no
se puede ser embajador, ni marinero, ni andar en pantalones”. Las mujeres
opinaron que aún existe discriminación contra ellas en especial en el área
rural, en la que se fomenta el machismo.
La
conclusión es que si bien se ha avanzado, le queda a la mujer un gran camino
por recorrer: El de mejorar sus niveles de aceptación, ilustrando la necesidad
de un gran programa de desarrollo de la autoestima femenina.
2.3 Rol
laboral
La presentación sobre el
autoconcepto femenino anticipaba la afinidad e identificación de la mujer con
su rol laboral; el estado civil incide en el desempeño de este rol; en la
actualidad hay gran cantidad de mujeres incursionando en el sector financiero,
especialmente las más jóvenes, solteras y casadas. Las solteras se han
vinculado mayormente al sector de servicios y la mayoría de casadas se
encuentran en el sector independiente. El estado civil no incide en que la
mujer tenga o no un cargo directivo.
CUADRO #16: Análisis
porcentual comparativo de la participación de la mujer en sectores económicos
según su estado civil
SECTOR ECONÓMICO
|
|||||
ESTADO CIVIL
|
Finanzas
|
Servicios
|
Producción
|
Independiente
|
|
Soltera
|
40.4
|
56.1
|
42.6
|
25.0
|
|
Casada/ unión libre
|
50.0
|
38.3
|
46.3
|
58.3
|
|
Separada/ viuda
|
46.2
|
8.6
|
10.2
|
16.7
|
|
CUADRO #17: Análisis
porcentual comparativo: Incidencia del estado civil en cargos de dirección de
personal
TIENE EMPLEADOS
|
||
ESTADO CIVIL
|
Si
|
No
|
Soltera
|
40.3
|
42.8
|
Casada/ unión libre
|
46.3
|
47.6
|
Separada/ viuda
|
13.4
|
9.6
|
A continuación se profundiza en este
aspecto, a partir de cruzar cómo se considera la mujer como trabajadora con
variables como estado civil, sector económico, con quién vive y si tiene
empleados.
CUADRO #18: Análisis
porcentual comparativo sobre la autopercepción del rol laboral de la mujer
CALIFICACIÓN
|
||||
ESTADO CIVIL
|
Muy buena
|
Buena
|
Deficiente
|
Muy deficiente
|
Soltera
|
58.7
|
38.0
|
0.7
|
0.0
|
Casada/ unión libre
|
51.3
|
46.0
|
0.7
|
0.0
|
Separada/ viuda
|
48.6
|
48.6
|
2.9
|
0.0
|
SECTOR ECONÓMICO
|
||||
Financiero
|
55.8
|
40.4
|
0.0
|
0.0
|
Servicios
|
56.3
|
42.2
|
0.9
|
0.0
|
Producción
|
49.1
|
47.2
|
0.9
|
0.0
|
Independiente
|
50.0
|
50.0
|
0.0
|
0.0
|
CON QUIEN VIVE
|
||||
Esposo/ hijos
|
52.0
|
46.4
|
0.8
|
0.0
|
Esposo
|
52.0
|
33.3
|
8.3
|
0.0
|
Familia de
procreación
|
52.5
|
45.6
|
1.5
|
0.0
|
Padres/ hermanos
|
59.8
|
37.8
|
1.2
|
0.0
|
Padre/ madre
|
50.0
|
48.3
|
0.0
|
0.0
|
Familia de origen
|
55.6
|
42.3
|
0.7
|
0.0
|
TIENE EMPLEADOS A CARGO
|
||||
Sí
|
58.2
|
38.8
|
1.5
|
0.0
|
No
|
54.2
|
42.2
|
1.2
|
0.0
|
Las mujeres
tienen un alto autoconcepto de su rol como trabajadoras; ninguna se percibe
como muy deficiente; en relación con el estado civil la mayor parte de solteras
se consideran buenas; la mayor parte de viudas buenas y el mayor porcentaje de
mujeres que evalúa su rol laboral como deficiente, son separadas/ viudas. En
cuanto al sector económico la mayor satisfacción laboral se da en el sector
finanzas, seguida del independiente. El hecho de vivir con la familia de origen
se relaciona con el alto grado de satisfacción laboral femenino.
El alto
porcentaje de las que no se consideran “buenas o muy buenas” amas de casa (55%)
evidencia la notoria disminución de la participación de la mujer en roles
domésticos: las razones para considerarse buenas amas de casa (ser buenas
administradoras del tiempo, hacerlo con gusto, cumplir en el hogar), distan
bastante de las razones de eficiencia por las que se autoevalúan como buenas
trabajadoras.
La mujer de
hoy hace más comentarios positivos de su rol laboral que el de ama de casa;
opina que éste último es desempeño bien y que el laboral le enriquece la vida
familiar. Así mismo busca una realización íntegra, dándole prioridad a su
realización personal y buscando reconocimiento en sus actividades.
Las mujeres se
ven a sí mismas como responsables, sinceras y honestas. Esta imagen que la
mujer trabajadora tiene de sí misma, le determina una gran diferencia con
relación al rol de sus antecesoras: el 97% de las encuestadas se consideran
“buenas o muy buenas” trabajadoras, mientas que sólo el 54% de ellas se
consideran “buenas o muy buenas” amas de casa.
2.4 Rol
ama de casa
Las mujeres se
autoperciben más y mejor como trabajadoras que como amas de casa; esto es mucho
más marcado en las solteras que en las casadas. Aunque tampoco se evalúan en le
rango muy deficiente, si disminuye significativamente la evaluación como “muy
buena” para el caso de ama de casa, y en menor proporción también disminuye la
evaluación como “buena”; las mujeres casadas que viven con sus esposos, son
aquellas que se consideran más “buenas” en su rol de ama de casa. Los
porcentajes de mujeres que autoperciben en forma deficiente este rol aumentan
considerablemente para el caso de las separadas/ viudas y de las mujeres que
viven con papá y mamá.
CUADRO #19: Autopercepción del
rol de ama de casa; análisis comparativo por estado civil, con quién vive,
sector económico y empleados a cargo
CALIFICACIÓN
|
||||
ESTADO CIVIL
|
Muy buena
|
Buena
|
Deficiente
|
Muy deficiente
|
Soltera
|
3.3
|
11.3
|
0.0
|
0.0
|
Casada/ unión libre
|
34.7
|
56.7
|
4.7
|
0.0
|
Separada/ viuda
|
22.9
|
40.6
|
22.9
|
0.0
|
SECTOR ECONÓMICO
|
||||
Financiero
|
25.0
|
32.7
|
3.8
|
0.0
|
Servicios
|
20.3
|
30.5
|
3.9
|
0.0
|
Producción
|
15.7
|
37.0
|
3.8
|
0.0
|
Independiente
|
25.0
|
37.5
|
0.3
|
0.0
|
CON QUIEN VIVE
|
||||
Esposo/ hijos
|
34.4
|
58.4
|
2.4
|
0.0
|
Esposo
|
25.0
|
66.6
|
8.3
|
0.0
|
Familia de procreación
|
52.5
|
59.1
|
2.9
|
0.0
|
Padres/ hermanos
|
36.5
|
6.1
|
1.2
|
0.0
|
Padre/ madre
|
0.0
|
20.9
|
10.0
|
0.0
|
Familia de origen
|
6.6
|
12.0
|
4.9
|
0.0
|
TIENE EMPLEADOS A CARGO
|
||||
Sí
|
16.4
|
43.3
|
4.5
|
0.0
|
No
|
19.2
|
34.3
|
5.4
|
0.0
|
Las
mujeres casadas creen que su pareja las califica como “buenas o muy buenas”,
pero la opinión que ellas tienen de sí mismas como trabajadoras es superior a
la que ellas creen que su esposo tiene de ellas.
2.5 Rol
compañera
Ya se ha
esbozado la situación económica de la mujer en relación con su compañero,
estableciendo cómo aún no es totalmente equitativa, pero ha logrado avances
significativos al respecto.
Últimamente la mujer ha modificado su
ubicación en la familia y en la sociedad: su incursión en el trabajo
profesional y el aumento del costo de vida, unidos al interés femenino de
participar en la producción, dirección institucional y ejercicio del poder, han
hecho que la mujer pase menos tiempo dedicada a lo familiar y doméstico,
actuando también como obrera, estudiante, ejecutiva, lo cual repercute en la
familia, que debe hacer ajustes para conservar su cohesión y cumplir con sus
funciones. Ahora se impone a la mujer la realización de dobles jornadas; a más
del trabajo remunerado, debe asumir el trabajo doméstico, para mantener el
hogar, la crianza y cuidado de los hijos.
CUADRO #20: Percepción de la
pareja, sobre los roles de trabajadora y ama de casa, en opinión de la mujer
(usted cree que su compañero o esposo la considera...)
PERCEPCIÓN
|
TRABAJADORA %
|
AMA DE CASA %
|
Muy buena
|
38
|
39
|
Buena
|
40
|
43
|
Indiferente
|
8
|
14
|
No la acepta
|
4
|
4
|
Otro
|
2
|
0
|
No contestó
|
8
|
44
|
Total
|
100
|
100
|
Se
confrontó la opinión de la mujer, con lo que ella cree que su pareja opina de
ella: Se nota mayor dinamismo en las razones de las respuestas a esta pregunta,
en relación con las del rol de ama de casa, aunque en la calificación y
comparación de los dos roles, se obtuvieron resultados semejantes.
En
la fase cualitativa del estudio se preguntó a las mujeres si dejarían su
trabajo si su compañero les exigiera renunciar a él y la mayoría de ellas
contestó: “No lo aceptaría, dialogaría, llegaría a un acuerdo, no contestaría,
lo pensaría”.
La
mujer busca libertad e independencia laboral. La opinión del hombre respecto a
su trabajo no siempre incide en su determinación de acción. La mujer no quiere
perder su rol femenino, ni su rol de madre y esposa. Cada día existen más
espacios para la mujer; es importante que continúe ganándolos, con mayor autonomía
e independencia. En la actualidad el matrimonio y los hijos se aplazan o se
cambian por otras aspiraciones (laborales, profesionales, sociales, etc).
2.6 Mujer,
integrante activa del mercado
La mujer gasta sus
ingresos principalmente en: “Hogar arriendo, Personales, Alimentación,
Vestuario”. Las solteras están más dispuestas hacia el consumo y a comprar
mejor nivel de vida (vestuario, educación) y las casadas a contratar el
servicio doméstico.
CUADRO #21:
Perfil femenino de gastos. Frecuencia de compra
FRECUENCIA
|
|||||
GASTOS
|
Siempre %
|
Casi siempre %
|
Con frecuencia %
|
Pocas veces %
|
Nunca %
|
Alimentación
|
49
|
10
|
18
|
16
|
5
|
Vivienda
|
37
|
3
|
4
|
10
|
37
|
Medicina
|
16
|
6
|
12
|
48
|
10
|
Seguros
|
22
|
3
|
5
|
12
|
42
|
Gastos vehículo
|
13
|
3
|
3
|
11
|
52
|
Servicios públicos
|
38
|
11
|
10
|
16
|
19
|
Restaurantes
|
14
|
8
|
19
|
37
|
13
|
Viajes
|
10
|
9
|
16
|
38
|
16
|
Recreación
|
15
|
14
|
25
|
28
|
8
|
Educación propia
|
35
|
9
|
12
|
12
|
21
|
Educación familia
|
25
|
6
|
9
|
10
|
33
|
Vestuario personal
|
63
|
17
|
10
|
6
|
0
|
Vestuario familia
|
23
|
10
|
14
|
20
|
21
|
Servicio doméstico
|
24
|
6
|
10
|
9
|
36
|
CUADRO #22: Perfil
femenino de gastos. La mujer siempre paga:
CONDICIÓN
|
PERFIL DE GASTOS DE LA MUJER
|
|||||||
ESTADO CIVIL
|
Vivienda
|
Seguros
|
Gastos carro
|
Servicios
|
Educación
(propia)
|
Educación
(hijos)
|
Vestido
(propio)
|
Vestido
(hijos)
|
Soltera
|
42.0
|
21.3
|
10.7
|
37.3
|
38.7
|
12.7
|
71.3
|
10.0
|
Casada/ unión libre
|
26.6
|
16.0
|
12.7
|
31.3
|
30.0
|
29.3
|
52.7
|
28.7
|
Separada/ viuda
|
57.1
|
54.3
|
28.6
|
65.7
|
37.1
|
52.9
|
77.1
|
57.1
|
EDAD |
||||||||
22- 30
|
34.0
|
20.8
|
10.1
|
30.8
|
38.4
|
16.4
|
61.6
|
31.3
|
31- 40
|
48.5
|
26.3
|
14.1
|
45.5
|
29.3
|
39.4
|
61.6
|
31.3
|
Mayor de 41
|
31.7
|
19.0
|
20.6
|
46.0
|
31.7
|
31.7
|
68.3
|
36.5
|
Las
mujeres de mayor edad, y las separadas y viudas han logrado una mayor
estabilidad económica y en sus gastos, en cuanto a seguros, vehículo, vivienda.
CUADRO #23: Análisis
porcentual comparativo del comportamineto económico, por estado civil
CATEGORÌA
|
Invierte
|
Siempre él
|
Paga ella
|
La cuenta ambos
|
Estado civil
|
||||
Soltera
|
54.7
|
12.7
|
1.3
|
14.0
|
Casada/ unión libre
|
70.0
|
14.0
|
0.6
|
20.0
|
Separada/ viuda
|
45.7
|
17.1
|
0.0
|
11.4
|
Edad
|
||||
22- 30
|
62.3
|
11.3
|
0.6
|
17.6
|
31- 40
|
59.6
|
14.4
|
1.0
|
19.2
|
Mayor de 41
|
60.3
|
20.6
|
0.0
|
11.1
|
La mujer
trabaja para contribuir con un aporte en sus hogares y ahorra para proporcionar
una seguridad económica. Lo anterior es válido tanto para mujeres solteras como
casadas. Los productos o servicios que las mujeres están demandando son: ropa,
alimentación, servicios públicos y cosméticos. El 60% de las mujeres están
invirtiendo, en: hogar, gastos personales, títulos de capitalización, finca
raíz. Las solteras tienen inversiones en CDT.
Se nota
una tendencia creciente de la mujer hacia el ahorro. Es frecuente encontrar
mujeres con varias cuentas de ahorro y depósitos a término; no obstante existe
la tendencia en alguna de ellas a considerar la compra de artículos para el
hogar.
2.7 Satisfacción
sexual
Una de las variables utilizadas
para identificar el rol cambiante de la mujer es su actitud con respecto al
sexo.
CUADRO #24: Satisfacción sexual
RESPUESTAS
|
FRECUENCIA
|
PORCENTAJES
|
Muy satisfechas
|
43
|
13
|
Satisfechas
|
152
|
45
|
Ni satisfechas ni
insatisfechas
|
70
|
21
|
Insatisfechas
|
24
|
7
|
Muy insatisfechas
|
4
|
1
|
Otros
|
27
|
8
|
No contestan
|
19
|
5
|
La gran mayoría de ellas opina
que la mujer ha ganado –y ejerce su libertad-: El 58% de las entrevistadas
consideran que la mujer de hoy está satisfecha o muy satisfecha sexualmente.
SATISFACCIÓN SEXUAL
|
Muy satisfecha
|
Satisfecha
|
Ni satisfecha ni insatisfecha
|
Insatisfecha
|
Muy insatisfecha
|
CON QUIEN VIVE
|
|||||
Esposo/ hijos
|
16.8
|
46.4
|
18.4
|
3.2
|
0.8
|
Esposo
|
16.6
|
41.7
|
25.0
|
16.6
|
0.0
|
Familia de
procreación
|
16.8
|
46.0
|
19.0
|
4.4
|
0.7
|
Padres/ hermanos
|
9.8
|
44.0
|
23.2
|
6.1
|
0.0
|
Padre/ madre
|
8.3
|
50.0
|
23.3
|
6.7
|
1.7
|
Familia de origen
|
9.2
|
46.5
|
23.2
|
6.3
|
0.0
|
ESTADO CIVIL
|
|||||
Soltera
|
10.0
|
44.0
|
22.7
|
9.3
|
1.3
|
Casada/ unión
libre
|
17.3
|
45.3
|
22.7
|
4.0
|
1.3
|
Separada/ viuda
|
5.7
|
42.9
|
22.9
|
14.3
|
2.9
|
La convivencia
se configura en un factor determinante de la satisfacción sexual femenina.
A partir
de las respuestas abiertas y de la etapa cualitativa del estudio, se
identifican claramente 5 grupos:
1.
Las mujeres de rol activo (70%): Son aquellas que consideran que la mujer de hoy
tiene menos tabúes, tiene más libertad. Más posibilidad de expresar sus deseos,
de escoger y exigir; es decir, juega cada vez un papel más activo. En este
grupo se identifican dos categorías: Las hedonistas (que corresponde a
quienes creen que la mujer está muy satisfecha) escala superior en
satisfacción, que dan razones tales como placer, libertad de elección,
posibilidad de exigir, más comprensión, acople...Las racionales (que
corresponden a quienes creen que la mujer está satisfecha) y que dan razones
como: mejora en las comunicaciones.
2.
Las mujeres de rol pasivo (8%): Son aquellas que creen que el cambio en su rol se
debe al cambio en el rol del hombre (son menos machistas, la aceptan como
mujer...).
3.
Las variaditas
(9%): Son aquellas que atribuyen la satisfacción sexual de la mujer a otras
razones tales como: porque desean tener hijos, porque es una buena compensación
del trabajo, porque lo han leído o lo han escuchado.
4.
Las puritanas
(5%): Son aquellas que creen que el sexo es pecado y dan razones “negativas” de
satisfacción sexual: porque se han perdido los valores, porque no dialoga,
porque no existe lo perfecto.
5.
Las amorosas
(1%): Son aquellas que consideran “explícitamente” que la mujer de hoy está
satisfecha o muy satisfecha sexualmente, por amor. Desafortunadamente sólo 2 de
las 339 mujeres encuestadas dieron esta respuesta.
Al codificar los resultados del
estudio, las mujeres con opinión neutra (ni satisfecha ni insatisfecha), daban
razones que coincidían con la dadas por las insatisfechas. Por ello se asumió,
para efectos de tabulación y análisis, la no satisfacción, a la insatisfacción,
y se ubicaron 3 grandes categorías de insatisfacción sexual;
1.
Las que tienen problemas con su pareja: Debidos a conflictos, a inestabilidad o a
condiciones de vida. Con alguna frecuencia terminan en separación. Un alto
porcentaje de estas mujeres habla de la infidelidad como una opción para la
expresión de sus deseos insatisfechos.
2.
Las víctimas
de los tabúes: Las personas de este grupo afirman que la insatisfacción de
la mujer se debe a problemas de cultura y en general, a la falta de
información.
3.
Las víctimas
de machismo: Quienes atribuyen su insatisfacción al “estancamiento del
hombre” a la manipulación de que ellas son objeto, o en general a problemas
externos.
Un 8% no ubicó su opinión en la
escala satisfacción- insatisfacción, prevista en el estudio. Ellas conforman a
la vez, de acuerdo con las razones que presentan, 3 grupos básicos.
1.
Las que no
generalizan: Consideran que es un tema muy personal en el sentido de que
depende de cada mujer, de la pareja, del momento, del medio, de la
cultura...Estas mujeres piensan que no se puede generalizar al respecto.
2.
Las que no
permiten intromisiones: Consideran que este es un tema muy personal en el
cual no se debe comprometer un estudio. A algunas de ellas les disgustó la
pregunta.
3.
Las incongruentes:
Son aquellas que a pesar de no ubicarse en la escala de satisfacción-
insatisfacción dan razones que corresponden a dicha escala, tales como: más
exigentes, machismo, pérdida de valores...
Se han identificado, respecto
de su sexualidad, 2 grandes categorías de mujeres:
1.
Aquellas que son “dueñas de su destino”, que lo
han luchado y lo han ganado. Aquellas que han exigido y que lo disfrutan. A
ellas las hemos llamado “mujeres de rol activo”, pero en realidad corresponden
a empresarios de lugar de control interno que crean empresas y que en general
sustentan el desarrollo económico.
2.
Aquellas que a pesar de estar satisfechas, dejan
su destino en manos de su pareja. Algunas le dan connotaciones negativas al
sexo. Por lo general creen que la mujer se encuentra insatisfecha. No toman la
iniciativa para su satisfacción: adjudican su insatisfacción a factores
externos, tales como el machismo. Es posible que el autoconcepto de estas
mujeres, las lleve a no luchar por su desarrollo. Corresponden a aquellas
personas que exigen “líderes directivos”.
Conclusiones
Cuadro #26:
Autopercepción de la mujer en sus roles de trabajadora y ama de casa (usted se
considera...)
PERCEPCION
|
TRABAJADORA
|
AMA DE CASA
|
||
#
|
%
|
#
|
%
|
|
Muy buena
|
183
|
54
|
66
|
19
|
Buena
|
146
|
43
|
117
|
35
|
Deficiente
|
4
|
1
|
15
|
4
|
Muy deficiente
|
0
|
0
|
0
|
0
|
Otro
|
6
|
2
|
4
|
1
|
No contesto
|
137
|
40
|
||
Total
|
339
|
100
|
339
|
100
|
USTED SE CONSIDERA
|
%
|
|||
Mejor trabajadora
que ama de casa
|
45
|
|||
Mejor ama de casa
de trabajadora
|
8
|
|||
Ambos igual
|
43
|
|||
Otros
|
2
|
|||
Total
|
100
|
Cuadro #27: Análisis porcentual comparativo de los
roles de trabajadora y ama de casa en relación con el estado civil, sector
económico, personas con las que vive, empleados a cargo
CALIFICACION
|
TRABAJADORA
|
AMA DE CASA
|
||
ESTADO CIVIL
|
Muy buena
|
Buena
|
Muy buena
|
Buena
|
Soltera
|
58.7
|
38.0
|
3.3
|
11.3
|
Casada/ unión
libre
|
51.3
|
46.0
|
34.7
|
56.7
|
Separada/ viuda
|
48.6
|
48.6
|
22.9
|
40.6
|
SECTOR ECONOMICO
|
||||
Financiero
|
55.8
|
40.4
|
25.0
|
32.7
|
Servicios
|
56.3
|
42.2
|
20.3
|
30.5
|
Producción
|
49.1
|
47.2
|
15.7
|
37.0
|
Independiente
|
50.0
|
50.0
|
25.0
|
37.5
|
CON QUIEN VIVE
|
||||
Esposo/ hijos
|
52.0
|
46.4
|
34.4
|
58.4
|
Esposo
|
52.0
|
33.3
|
25.0
|
66.6
|
Familia de
procreación
|
52.5
|
45.6
|
52.5
|
59.1
|
Padres/ hermanos
|
59.8
|
37.8
|
36.5
|
6.1
|
Padre/ madre
|
50.0
|
48.3
|
0.0
|
20.9
|
Familia de origen
|
55.6
|
42.3
|
6.6
|
12.0
|
EMPLEADOS A CARGO
|
||||
Sí
|
58.2
|
38.8
|
16.4
|
43.3
|
No
|
54.2
|
42.2
|
19.2
|
34.3
|
Cuadro #28: Análisis porcentual comparativo sobre cómo
evalúa la mujer sus roles de trabajadora y ama de casa
CATEGORIAS
|
|||
ESTADO CIVIL
|
Mejor trabajadora
que ama de casa
|
Mejor ama de casa
que trabajadora
|
Igual
|
Soltera
|
7.3
|
0.0
|
6.6
|
Casada/ unión
libre
|
40.7
|
11.3
|
42.7
|
Separada/ viuda
|
54.3
|
2.9
|
22.9
|
SECTOR ECONOMICO
|
|||
Financiero
|
25.0
|
5.8
|
30.8
|
Servicios
|
24.2
|
3.9
|
24.2
|
Producción
|
30.6
|
4.6
|
20.4
|
Independiente
|
25.0
|
16.6
|
29.2
|
CON QUIEN VIVE
|
|||
Esposo/ hijos
|
38.4
|
12.8
|
42.4
|
Esposo
|
66.6
|
8.3
|
25.0
|
Familia de
procreación
|
40.9
|
12.4
|
40.9
|
Padres/ hermanos
|
3.7
|
0.0
|
2.4
|
Padre/ madre
|
23.3
|
0.0
|
13.5
|
Familia de origen
|
12.0
|
0.0
|
7.0
|
EMPLEADOS A CARGO
|
|||
Sí
|
29.9
|
4.5
|
28.4
|
No
|
27.7
|
5.4
|
25.9
|
Las cifras de los cuadros son
contundentes y reafirman los planteamientos sobre autopercepción femenina. El
trabajo es en la actualidad fuente de ingresos, de realización personal, de
conquista de reivindicaciones sociales, educativas de las cuales antes carecía
la mujer; sin embargo el costo ha sido alto; la mujer no estaba preparada para
estas nuevas funciones, y en ocasiones ve como “incompatibles” su rol doméstico
con el laboral. Sería ideal promover el desarrollo social con una
infraestructura de apoyo a los roles domésticos, tal como ha venido
evolucionando el consumo femenino; igualmente afianzar el equilibrio en la
óptima realización de los roles laboral y doméstico, de modo que no se vean
como excluyentes sino complementarios, avanzando a la vez en la cualificación
de los roles masculinos.
Las mujeres casadas se
consideran mejores amas de casa; las solteras mejores trabajadoras; quienes se
encuentran en el sector de producción aventajan su percepción como muy buenas
trabajadoras sobre las mujeres en otros sectores.
CUADRO #29: Análisis porcentual comparativo: Hoy la
mujer es más feliz
ESTADO CIVIL
|
SI
|
Soltera
|
78.0
|
Casada/ unión
libre
|
72.0
|
Separada/ viuda
|
65.7
|
SECTOR ECONOMICO
|
|
Financiero
|
86.5
|
Servicios
|
68.0
|
Producción
|
82.4
|
Independiente
|
54.2
|
VIVE CON
|
|
Esposo/ hijos
|
73.6
|
Esposo
|
66.6
|
Familia de
procreación
|
73.0
|
Padres/ hermanos
|
81.7
|
Padre/ madre
|
73.3
|
Familia de origen
|
78.2
|
TIENE EMPLEADOS
|
|
Sí
|
79.1
|
No
|
74.1
|
EDAD
|
|
22- 30
|
77.4
|
31- 40
|
70.7
|
Mayor de 41
|
68.3
|
La
mayoría de las mujeres consideran que en la actualidad son más felices que
antes, dado que tienen gran participación en la vida social y económica.
En
general, cuando las mujeres salen a actividades sociales, la cuenta es pagada
por él, pues es “quien invita”; se observa una mayor participación de la mujer
en su relación con el hombre. Las mujeres de menor rango de edad, entre 22 y 30
pagan ambos; la mayor participación de ambos se da en “algunas veces”, luego
siempre, seguido por ella algunas veces.
En resumen
Es largo
el camino que le espera a las mujeres latinoamericanas en su lucha por el
desarrollo: Quienes lo han logrado manifiestan “haberlo ganado”.
En
términos generales el avance de la mujer en cuanto a los espacios que ocupa y
las posibilidades, se ha dado en los planos personal, familiar, laboral:
1.
En lo personal:
El matrimonio y la maternidad al igual que el rol doméstico ya no son
considerados como la opción fundamental y única de la mujer, quien ha asumido
otros aspectos como prioritarios: Su formación personal, profesional y laboral,
buscando elevar el status social y el autoconcepto femenino, lo cual incide en
algunos hábitos y comportamientos cotidianos que buscan realizaciones en
diferentes niveles.
2.
En lo familiar:
Existe una marcada tendencia a compartir roles y responsabilidades, tanto
en la formación y educación de los hijos, como en los quehaceres y presupuesto
familiar, lo cual hace que exista también incidencia en la posibilidad de tomar
decisiones conjuntas, dentro de una nueva concepción de igualdad y reciprocidad
entre personas de ambos sexos. La mujer, al estar vinculada al mercado laboral,
puede enfrentar sin mayores traumatismos una eventual separación conyugal, con
las implicaciones que trae, ya que generalmente asume el cuidado y tutela de
los hijos. En el mismo sentido, la mujer soltera aplaza la posibilidad de un
vínculo conyugal, apreciando su libertad e independencia. En cuanto a las
posibilidades de acceso al sistema educativo, se han incrementado
significativamente.
3.
En lo laboral:
No existen oficios ni quehaceres vedados para la mujer, puesto que gracias
a su capacidad, iniciativa, cualificación y eficiencia, ha logrado acceder en
los diferentes niveles, hasta llegar a ocupar posiciones que implican
destacados cargos de responsabilidad de dirección; sin embargo existen factores
condicionantes de carácter socio- económico, propios de los países
subdesarrollados, tales como inseguridad y violencia, que obstaculizan el
desarrollo social y personal, tanto de la mujer como del hombre.
[1] M.A. en
Ciencias de la Educación
con énfasis en Educación Comunitaria; Trabajadora Social; Licenciada en
Educación Familiar y Social; Licenciada en Ciencias Sociales; Gerente de
Desarrollo Humano Crecimiento Organizacional Ltda.. Docente Investigadora
Universidad Pedagógica Nacional.
[2] Economista
Industrial; Especialista en Mercadeo; Gerente Crecimiento Organizacional Ltda.
[3] Ingeniero
Mecánico; Especialista en Administración de Empresas y en Mercadeo.